Seguidores

domingo, 10 de agosto de 2008

THE DARJEELING LIMITED

Como todas las películas de Anderson, el paisaje frente a los ojos se visualiza parejo; sin mayores sobresaltos, gritos, llantos o risas, el especial humor omnipresente del director está en cada personaje, diálogos y escenas, haciendo de esta película uno más de sus arrebatos cinematográficos y estampando en ella, sin duda alguna, su clara y más que reconocible firma.



Así como Tim Burton tiene como musa inspiradora la inconfundible silueta de Johnny Deep, el director de “The Royal Tenenbaum” parece haber encontrado el suyo en Owen Wilson, a quién sigue incorporando en sus proyectos prácticamente, como parte de su firma personal. Afortunadamente, la simpática presencia del actor hace más digeribles las locuras del director resultando de esta unión películas más bien aceptables pero que comienzan a rayar en la locura del cinearte por el particular enfoque que logra de las relaciones humanas.

Ahora Wilson - que está medio tocado- en compañía de Adrien Brody (“El Pianista”) - que ya es un flaco enigmático - y Jason Scwarzman (María Antonieta) - otro nuevo loco en la escena - son tres hermanos que no se han visto en una cantidad suficiente de tiempo como para ni siquiera tener un tema en común y que, luego de la muerte de su padre, se dan cita para un viaje a la India convocado por uno de ellos para intentar un “viaje de reconexión” entre ellos mismos, sus vidas y sus lazos familiares.

Lo que comienza como un viaje casi obligatorio, donde todo es recelo y molestia, y donde los niveles de tolerancia entre ellos son nulos, se va convirtiendo en la medida que avanza el viaje - y el film – en una extraña complicidad entre ellos, donde cada uno conoce el límite de su hermano y se aceptan las manías que cada uno tiene con algo parecido al cariño. Los secretos que cada uno esconde del otro son develados y una leve red de soporte se va tejiendo entre ellos.

Acompañados de una excelente banda sonora a lo largo del viaje, los tres hermanos descubrirán el significado de la vida, la muerte, el sexo, el amor y la comunicación, todo esto envuelto en la particular visión de Anderson, claro está y con una locación de lujo, donde tan solo por la fotografía - junto a exposición de la cultura y ritos, la parte pobre, adinerada, espiritual y turística de India y la manera de relacionarse de ellos con toda esta riqueza de estímulos que tienen los protagonistas - vale la pena verla.

En resumen, The Darjeeling Limited es una película de 3 hermanos intentan reconectarse con ellos mismos y sus vidas en un viaje a la India, donde una serie de eventos inesperados harán de su aventura una verdadera travesía espiritual donde lo más importante será el bienestar de cada uno como un todo. Simpática, pero recomendable de ver solamente si disfrutó o le encontró algún sentido a “The Royal Tanenbaum” y “Life Aquatic”. De ser así, o gustarle la India, véala.

No hay comentarios: